Capítulo 92
Capítulo 0092
-Natalia, ¿qué planeas hacer ahora? ¿El señor Ferrer ha mencionado algo sobre cuándo se casarán?
Felicia apretó con fuerza dientes: - Pues si no nos queda otra
opción, voy a exponer a Silvia en línea y hacer que sea socialmente eliminada
Natalia se levantó y fue a podar las flores que estaban junto a ella.
-No lo hagas -dijo, deteniéndose un momento para explicarle-. Eso afectaría a Julio.
Felicia finalmente cedió.
Una vez que la despidió, Natalia movió la tijera que llevaba en la mano y de repente en ese momento una rosa cayó al suelo
Ya sea en el pasado o en el presente, Julio nunca había mencionado- casarse con ella..
A veces, hay que admitir que el amor es muy evidente. Parecía que Julio nunca había sentido verdaderamente afecto por ella. Incluso, cuando regresó al país llena de confianza, diciendo que conseguiría a Julio como fuera, hasta ahora, solo levaba el título de su novia, a Natalia le parecía todo eso muy ridiculo.
Al pensar en eso, ella arrojó una enorme jarra de flores de la mesa al suelo. El jarrón se rompió al instante, y las flores dentro de él también
cayeron..
Las manos de Natalia se cortaron, y comenzaron a sangrar.
Mirando la sangre que brotaba, de repente pensó en algo. Recogió los fragmentos del suelo y con gran determinación se cortó la muñeca. Luego, ella le envió las fotos y mensajes a Julio.All content © N/.ôvel/Dr/ama.Org.
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[Julio, me duele mucho, quiero verte ¿Puedes venir a verme?]
ovvio
Media hora después, Julio llegó al apartamento Brisas del Barrio y vio a Natalia sentada en el suelo, con sangre en su muñeca cayéndose, y esparciéndose como gigantes pétalos de ciruelo. Frunció el ceño: -¿Por qué te lastimas a ti misma?
Al verlo venir, Natalia se puso de pie tambaleándose y directo hacia los brazos de él.
se lanzó
-Julio, ¿me aceptarías? Te lo ruego, incluso si no te casaras conmigo, te lo ruego, jacéptame!
Los ojos de Julio mostraban un gran disgusto mientras la apartaba.
Te olvidaste lo que te dije?
Natalia fue rechazada,,su rostro estaba enrojecido, pero aún así insistía: No me lo olvidé. Dijište que como le salvé la vida a la señora, serías muy amable conmigo, ¡que me darías lo que quisiera! Julio, ¿no éramos felices cuando estábamos juntos antes? Todos decían que éramos perfectos el uno para el otro. Entonces, ¿por qué
ahora no quieres continuar conmigo? ¿Realmente es por Silvia? ¿No
dijiste que no te gustaba?
Mencionar a Silvia era como tocar una fibra muy sensible en el
corazón de Julio. La presión a su alrededor disminuyó de inmediato. Natalia solo había donado sangre para salvar la vida de su madre, pero ahora estaba demandando cada vez más.
Finalmente, Julio perdió la paciencia por completo.
-Te doy dos opciones: una, ser una esposa ficticia para mí, como Silvia solía ser. No te brindak más ayuda. NO Dos mantener nuestra relación actual. Te proporcionaré todos los recursos que necesites.
Él sabía con claridad que Natalia siempre había querido el estatus de
ser su esposa.
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Natalia vaciló. Antes de regresar al país, había investigado muy bien. a Silvia y había descubierto que, más Ve que la señora Ferrer, era más bien una sirvienta de la familia. Pero simplemente mantener la relación
actual no era suficiente para Natalia.
Ella permaneció en completo silencio. Julio miró su muñeca nuevamente y notó que el corte no era profundo, sabía que ella estaba actuando, asi que se preparó para irse.
Sin embargo, Natalia lo abrazó nuevamente por detrás.
-Julio, no quiero elegir, por favor, no
te vayas. Te lo ruego, quédate esta noche conmigo, ¿yale? Tengo miedo de estar sola. Hay mucha gente hablando de mí en internet, dicen que soy solo una simple payasa, que tú ni siquiera me quieres. Read the latest
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Julio escuchó su voz temblorosa, pero no mostró ningún signo de compasión, solo una gran impaciencia. Se apartó de ella.
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